Carta anónima

No conoce mi nombre, probablemente nunca me ha visto por la calle, pero yo sí que le veo todos los días en el mapa diario de los ingresados. Solo quiero decirle que aquí fuera todo el mundo espera vuestra recuperación; no se puede ir a misa ni a las mezquitas, pero rezamos cada día por vosotros para que tengáis una buena recuperación. Fuera, hay una ola increíble de solidaridad con vuestros cuidadores. por cierto, si escucha a las ocho de esta noche unos aplausos, que sepa que van dirigidos a su cuidadora y a su médico y a todo el sistema que hará que se recupere pronto.

Continuar leyendoCarta anónima